Lo primero para que tengas en cuenta es que esto sucedió porque esta madre fue separada de sus cachorros.
Sin embargo, no le fue imposible dirigir todo su amor un par de gatitos que necesitaban alimento, amor y cuidado.
Su nombre es «Esperanza» y sólo tiene un año de edad y que fue recogida por un refugio animal.
Poco después llegaron los gatos recién nacidos y ella los amamantó por dos meses.
Literalmente, su amor y compasión les salvó la vida.
El instinto desempeña un papel muy importante dentro de este proceso, pero la maternidad en las perras va mucho más allá.
En este aspecto, las perras se ven condicionadas por la experiencia y el aprendizaje que hayan recibido instruidas por su propia madre.
Igual ella las amó y al igual que los gatos, encontró una familia adoptiva.
Fuente: Misanimales.com