Como hacia la línea de meta, las personas vuelan en las alas del amor hacia el momento más bello y especial de su vida: la boda; nada más bello que los anillos y las palabras «los declaro marido y mujer». Pero al parecer, a partir de ese momento lo más interesante sólo comienza.
Cualquier cambio divide la vida en un “antes“ y un ”después». La boda no es una excepción. Se cree que antes de la boda hay más romance y después, hay muchos problemas domésticos. Claro que entre marido y mujer todavía hay mucho amor y cariño pero ahora lo demuestran de otra forma.
Este cambio tan serio en la vida influye en gran medida en cualquiera que esté casado o lo haya estado: se desvanecen algunas ilusiones y se obtienen muchos bonos agradables de los que no gozaban antes de casarte.
Quien diga que el matrimonio no cambia nada en la vida, es un mentiroso y de los más grandes y descarados. Una vez que te hayas dado el paseo por el pasillo de la iglesia y hayas dicho todas esas dulces promesas, tu relación cobrará un nuevo significado.
Cuando te conviertas en la mujer de alguien (o el marido), comprenderás de lo que estamos hablando. Cambia tu modo de sentir la relación con la otra persona y también tu modo de pasar el tiempo.
Cada pareja tiene su historia de vida antes y después del matrimonio. Pero hoy les traigo algunas situaciones típicas en las cuales tal vez te reconozcas a ti mismo.