Los animales o más bien, nuestras mascotas tienen muchas ocurrencias. Son muchas las sonrisas y las carcajadas que nos sacan con cualquier cosa que hacen.
Por ejemplo, sabemos que hoy te vas a reír en cantidades alarmantes, pues este perro hizo algo muy gracioso.
Su humano o dueño aúlla y decide responderle, pero cuando su humano lo hace más fuerte, ya no encuentra otra salida.
¡Mira tu mismo, sorpréndete y ríe a carcajadas con esta graciosa situación!
Sin embargo, tu perro también odia muchas cosas de tu personalidad, por ejemplo:
1. Falta de rutina y estructura
Un perro no es un bebé, pero es parecido: requiere una rutina que lo haga sentirse tranquilo. La alimentación y los paseos deben ser constantes al igual que otras rutinas, como el entrenamiento.
Si lo retan por subirse al sillón, no hay que alentarlo a que se suba de vez en cuando ya que es confuso. Ellos necesitan aprender qué está bien y qué está mal para poder diferenciarlo.
2. Aburrirlos
Cuando un perro rompe cosas sin razón, hace travesuras o parece que tuviera demasiada energía no significa que sea malo sino que ¡está aburrido!. Es cierto que al final del día sus dueños solo quieren descansar y relajarse pero para ellos puede ser molesto y hasta insultante ya que estuvieron esperando todo el día su momento de juego.
3. No dejarlos pasear con tranquilidad
Los sentidos de los perros son muy potentes, por eso cuando las mascotas se detienen en los paseos a examinar algo es porque detectan alguna señal.
Entonces, cuando se los obliga a dejar de explorar y decodificar la información sensorial es lógico que las mascotas se estresen.
4. Vestirlos innecesariamente
Puede ser que los Pugs se vean tiernos con sus chalecos en invierno, pero en realidad una gran parte de los perros odia la ropa. Lo cierto es que el pelaje de los perros supone una verdadera barrera térmica natural para tolerar los distintos climas. Es innecesario que a un Husky o a un San Bernardo lo vistan con un chaleco o suéter cuando su pelaje es todo lo que necesitan.
5. Bañarlos muy seguido
Los perros necesitan bañarse porque, como cualquier otro animal, producen olores y suciedad, pero ciertamente no requieren un baño tan seguido como los humanos, sólo cuando es necesario.
La frecuencia es importante, los productos son importantes (nunca se debe usar shampoo de personas, solo productos para perros) y es una buena idea convertirlo en un juego: al igual que los humanos, cada perro tiene sus preferencias
6. Hablar sin gesticular
Los humanos necesitan comunicarse verbalmente todo el tiempo. Si bien es común que las mascotas aprendan una serie de palabras clave, no entienden el lenguaje humano, por eso, es necesario que los dueños no insistan en comunicarles todo de forma verbal.
Está demostrado que los perros pueden sentir las emociones de su amo según el tono de voz (por eso es importante no gritar) pero la comunicación entre perro y amo se da mediante el lenguaje no verbal.
Lo mejor es prestar atención al lenguaje corporal: si el perro se tensa, evita el contacto visual, baja las orejas o se relame, lo más probable es que no esté disfrutando en absoluto la demostración de amor.