La vida de los perros cada vez es mas trágica, todos los días vemos noticias que nos parten el corazón.
Según cuenta la vecina, este perrito se encontraba en las peores condiciones, que murio por hambre.
La vecina manifestó que el perrito mantenía encerrado en una terraza en la que no recibía alimentos ni agua. La dueña argumentó que el perro pertenecía a su expareja y desde que terminaron su relación amorosa nadie quiso hacerse cargo del perro.
Injustamente, el perro pagó las consecuencias de su irresponsabilidad, era un ser vivo que no tenía la culpa de las decisiones de sus cuidadores, quienes desde que lo recibieron asumieron el compromiso de velar por su bienestar.
Una vecina denunció la situación ante la Guardia Civil, gracias a su advertencia los agentes lograron rescatar al perro en El Campello, Alicante.
Detuvieron a la dueña, una mujer de 45 años, responsable del fallecimiento del perro que tenía aproximadamente dos años.
Tras rescatarlo, el animal fue llevado a una clínica veterinaria para que recibiera la atención médica que necesitaba. Estaba tan débil que apenas se podía mover, desafortunadamente falleció un día después.
Su caso ha conmovido a miles de activistas, diversas asociaciones que trabajan para defender los derechos de los animales ejercerán una acusación popular contra la mujer. Ahora esperan que se haga justicia y pague con todo el peso de la ley su delito, aunque nada podrá recuperar la vida del perrito es importante prevenir que ella siga cometiendo este tipo de actos.
Mientras tanto, la culpable permanece detenida en el juzgado de guardia de Alicante. En su declaración quiso justificar su acto alegando que el animal pertenecía a su expareja.
De no haber sido por la denuncia de la vecina su caso quizás quedaría impune, es importante alzar la voz contra cualquier indicio de trato inadecuado hacia los animales. En este caso fue demasiado tarde para salvar la vida del perro, pero en otros podría evitarse un desenlace fatal.
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