Vulgarmente, la vagina y los animales marinos son comparados para ser objeto de burlas, chistes y jugueteos.
Sin embargo, entre los tiburones y la parte íntima de las mujeres hay mucha más relación de lo que pareciera y no, no es ni de cerca uno de esos comentarios y comparativos ofensivos.
La similitud va mucho más allá; ambas vaginas son cavidades suaves y profundas con paredes viscosas que lubrican un líquido al momento de estirase.
Los tiburones emiten una sustancia orgánica llamada escualeno, la cual es secretada por su hígado y se les extrae para usarla en cremas hidratantes para dar suavidad y humedad a la piel.
Esta sustancia es similar, en cuanto a la consistencia, al líquido vaginal que secreta ésta para humectar las paredes y prepararla para las relaciones sexuales.
Ambas sustancias fungen como secreciones que además de humectar, protegen la piel y mantienen frescas y sanas las zonas en las que se aplica.
Eso quiere decir que el líquido vaginal sirve para proteger el cuerpo de infecciones y bacterias al igual que el sudor, el cual es 100 % necesario y de igual manera defiende al cuerpo de los organismos malignos que intentan entrar al cuerpo.
Sin embargo, a veces las secreciones generan malos olores en la vagina; pero más a allá de usar jabones líquidos o perfumes especiales, hay alimentos que son mejor evitar para prevenir el olor vaginal.
1. Sal
El exceso de sal puede causar retención de agua o infecciones urinarias. Al haber una acumulación de sal, ésta debe salir de alguna manera y en ocasiones es a través del sudor, lo que eleva la acidez y el pH, provocando olores desagradables.
2. Cebolla y Ajo
Son saborizantes naturales, por lo que afectan el sabor y el olor de la vagina. Esto es una gran complicación ya que sus composiciones afectan al olor. Hay quien asegura que su aroma es tan penetrante que puede causar incomodidad en las personas cercanas.
3. Especias
Estas afectan a la vagina en cuanto al olor y el sabor de sus fluidos. Al igual que a los alimentos, las especias le dan un gusto diferente; abusar de la pimienta u orégano, podría hacerte pasar un mal rato.
4. Frutas procesadas y enlatadas
Entre más frescas estén, mucho mejor. La mayoría contiene fibra, por lo que desintoxica todo el cuerpo, incluidos los fluidos. Procura la vitamina C que es un gran estimulante del sistema inmunológico. En cambio, las que vienen enlatadas son regularmente afectadas por los conservadores a los que son sometidas para poder mantener la frescura. Al mismo tiempo los químicos de las latas son como una especie de veneno que generan el desbalance del pH.
5. Lácteos
Es bien sabido que los productos derivados de la leche provocan que la mucosidad vaginal aumente. Por ello, consumir lácteos podría hacer que las secreciones vaginales sean más densas y por lo consiguiente, más olorosas.
Con una dieta sana puedes atenuar el mal olor vaginal o evitarlo, pero recuerda que no debes abusar de ningún alimento o de lo contrario, podrá ser también un abuso en el cuerpo, ya que éste tiene sus propios mecanismos para el cuidado de todas las partes que lo conforman. Aunque no está de más una ayuda, recuerda que cualquier abuso podría ser, incluso, mortal.